Hace unos meses todos estábamos muy emocionados con Clubhouse, el acceso era estrictamente por invitación de algún miembro, y se nos acababan en minutos cada vez que nos las reponía el sistema. Con algunos miles de usuarios la compañía levantó sus primeros 12 millones de dólares y obtuvo una valoración de 100 millones, menos de un año después llegaron a una valoración de 4 billones de dólares.
¿Pero qué pasó con la aplicación donde socializas en salas de conversación, con tu voz, en vivo? ¿Por qué en abril solamente fue descargada unas 900.000 veces si en febrero las descargas llegaron casi a 10 millones?
Algunos le atribuyen el desencanto a que aun no estaba completamente disponible para Android, (justo hace poco lanzaron su app para esa plataforma móvil y subió como era obvio su base de usuarios), otros hablan de que con la reapertura (lenta pero a paso seguro) de restaurantes, cines, cafés, estadios, y demás sitios donde la gente va a obtener entretenimiento en vivo, el tema de los «podcast en vivo» o de las «salas de conversación» se hace menos atractiva que la alternativa.
A mi me parece una alternativa interesante para hacer foros y conversaciones, aunque a veces es intenso y agotador para los moderadores, que en el futuro van a tener que ser secretos y llevar una máscara para así poder poner en mute y sacar de las salas (sin repercusiones) a quienes no respetan las normas del buen hablante y el buen oyente que nos enseñaron en la escuela.
Aún sigue siendo más popular que Twitter Spaces, y más completo, así que pasarán los días y veremos.